Centros Deportivos
En España los problemas de salud son el cuarto motivo de alta en un Club Deportivo.
La práctica de actividad física en beneficio de la salud
Según datos de la OMS dentro de la “Estrategia mundial sobre régimen alimentario, actividad física y salud” la inactividad física es el 4º factor de riesgo de la mortalidad mundial (6% de defunciones), por detrás de la hipertensión, el tabaco y el exceso de glucosa en sangre y seguida del sobrepeso. Es, además, la principal causa del cáncer de mama y colon (21-25%), la diabetes (27%) y las cardiopatías isquémicas.
El ejercicio físico puede intervenir positivamente sobre las ENT (Enfermedades No Transmisibles), que suponen el 60% de la mortalidad mundial. En concreto, está demostrado que la práctica regular disminuye el riesgo de padecer enfermedades coronarias, accidentes cerebrovasculares, diabetes tipo II, hipertensión, cáncer de colon, cáncer de mama y depresión. Además, interviene en el correcto control energético y el control del peso, por lo que ayuda a disminuir también otros factores de riesgo.
Por este motivo, en la 61ª Asamblea Mundial de la Salud (OMS) se puso en marcha a nivel planetario un plan de acción para la prevención y control de las enfermedades no transmisibles que incluye la promoción de la actividad física con el objetivo de formular y aplicar directrices nacionales sobre actividad física para la salud, ejecutar programas en el ámbito escolar y asegurar que los entornos físicos propicien la utilización de medios de desplazamiento activos.
Los beneficios de realizar actividad física regularmente son evidentes y, a día de hoy, la mayor parte de la población está concienciada de ello. El ejercicio es, además, una potente arma potenciadora del estado de salud. Su prescripción se hace necesaria en el tratamiento de la mayoría de las ENT.
La prescripción de actividad física en centros deportivos.
Los profesionales de la salud, médicos y fisioterapeutas, demandan, cada vez más, herramientas físicas para mejorar el estado de salud de sus pacientes o como coadyuvante en los tratamientos que prescriben.
Conveniencia de la prescripción de ejercicio.
Existe numerosos estudios que ponen de manifiesto la mejora de diversas patologías mediante la práctica regular de actividad física.
Las enfermedades más incidentes llevan asociada una alta recomendación de ejercicio físico, tanto a nivel preventivo como de mantenimiento de la condición física:
Cardiopatía coronaria
Se trata de unos de los principales problemas de salud en los países industrializados y su etiología es variable. Los estudios efectuados sugieren que la actividad física habitual reduce el riesgo de desarrollar hipertensión arterial. Además, los cambios psicológicos que se producen en los practicantes de ejercicio físico ayudan en la mejora de algunos factores de riesgo de la hipertensión: cambio de la conducta, control del estrés y de las tensiones emocionales. El ejercicio físico contribuye al control del peso y, por lo tanto, es fundamental en el tratamiento de la obesidad y de la diabetes tipo II (ambos factores de riesgo de la cardiopatía coronaria).
Osteoporosis
El ejercicio físico previene la pérdida de densidad ósea y las fracturas ya que es capaz de incrementar el contenido mineral óseo.
Cáncer
El cáncer de colon está asociado al sedentarismo. El ejercicio, acompañado de la ingesta de una dieta rica en fibra, es una buena medida preventiva de este tipo de cáncer y de otras enfermedades digestivas.
Envejecimiento
El sedentarismo y la falta de movilidad representan la mitad de las pérdidas funcionales asociadas con el envejecimiento. La realización de ejercicio previene y mejora los efectos del envejecimiento.
Diabetes mellitus
El ejercicio físico incrementa la tolerancia a la glucosa, así como una mejor y más rápida utilización de la misma.
Sistema nervioso
El ejercicio físico mejora las funciones intelectuales, reduce el tiempo de reacción para las labores mentales en las que participa la memoria y mejora la cognición en personas sedentarias de mediana edad. También aumenta el umbral del dolor y el bienestar corporal por la secreción de betaendorfinas.
Obesidad
La obesidad es un factor de riesgo para múltiples enfermedades (problemas o riesgos psicológicos, cardiovasculares, respiratorios, un mayor riesgo de padecer ciertos tipos de cáncer, diabetes, artrosis y tasas más elevadas de mortalidad general). El ejercicio físico juega un papel fundamental en el tratamiento de la obesidad para la reducción de grasas y la mejora cardiovascular.
Grupos de patologías
Por grupos de patologías, la traumatología, la reumatología, la cardiología, la geriatría, la neumología llevan asociado un alto índice de prescripción de ejercicio físico en una o varias de sus fases.
La ortopedia, la cirugía, la urología y la ginecología y la obstetricia prescribirán ejercicio para readaptar funciones o para poner en marcha mecanismos compensatorios.
Las enfermedades propias de la neurología y la psiquiatría promoverán el ejercicio físico para paliar efectos secundarios y prevenir la aparición de crisis.
La dermatología, al igual que la reumatología, se compone de multitud de enfermedades idiopáticas. En la mayoría de los casos, los médicos prescribirán ejercicio físico habitual para garantizar el buen estado circulatorio de la piel y la correcta eliminación de toxinas.
Cómo obtener la certificación plus.salud
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